La Asociación de Salesianos Cooperadores es la forma organizativa de la rama laical, fundada por Don Bosco, como una forma de ofrecer el sistema preventivo a los jóvenes necesitados por medio de personas comprometidas en realizar en sus familias, en las comunidades cristianas a las que pertenecen y en la sociedad, el común apostolado juvenil, popular y misionero, animados por el mismo espíritu de Valdocco, para la formación del joven y la salvación de su alma.
Coordinadora: María Victoria Cotugno (Coordinadora del Consejo Local)
La Asociación de Salesianos Cooperadores es la forma organizativa de la rama laical, fundada por Don Bosco, como una forma de ofrecer el sistema preventivo a los jóvenes necesitados por medio de personas comprometidas en realizar en sus familias, en las comunidades cristianas a las que pertenecen y en la sociedad, el común apostolado juvenil, popular y misionero, animados por el mismo espíritu de Valdocco, para la formación del joven y la salvación de su alma.
Coordinadora: María Victoria Cotugno (Coordinadora del Consejo Local)
Misión Según el pensamiento de Don Bosco, el/la Salesiano/a Cooperador/a realiza, en primer lugar, su apostolado en los compromisos cotidianos. Sigue a Jesucristo, hombre perfecto, enviado por el Padre al mundo. Por eso, se compromete a realizar el ideal evangélico del amor a Dios y al prójimo en las condiciones ordinarias de vida. Lo hace animado por el Espíritu Salesiano y llevando, por todas partes, una atención privilegiada a la juventud necesitada. Organización flexible La Asociación tiene una estructura flexible y funcional, fundada sobre tres ámbitos de gobierno: local, provincial y mundial. Con esta organización asegura la eficacia de su acción en el territorio, así como la apertura a la universalidad de la comunión y la misión. El Centro Local “Mamá Margarita” de Bernal se encuentra conformado por 47 sscc (35 activos), en dos grupos (Mamá Margarita y Buen Pastor). El Consejo Local (órgano colegiado de animación) está integrado por 7 consejeros (de ambos grupos) y un delegado sdb. El sentido de pertenencia a la asociación se da, en primer lugar, por la formulación de una promesa inicial al Proyecto de Vida Apostólico, en segundo lugar por la participación activa en las reuniones de cada grupo (espacio de formación, oración y de compartir la vida), y por último por la realización de un aporte voluntario basado en la solidaridad económica.